SITIO Y RENDICION DE BEJIS 1840
Miguel Macián.
Este año se cumplen 150 años de la toma del Castillo de Bejís por las tropas de Isabel II a los Carlistas.
D. Antonio Pirala, historiador, nos relata el acontecimiento en su libro "Historia e la Guerra Civil, y de los Partido Liberal y Carlista" (Tomo VI, pág. 27).
Dice así:
"Cubierto el Castillo de Alpuente y toda la línea de Río-Blanco, salieron de Titaguas, el 6 de mayo, Destoallar y Urbina a hacer el primer reconocimiento de Bejís, a cuya vista llegaron en la mañana del 7 sin el menor obstáculo.
Al descubrirlos rompió el fuego la artillería del Castillo y adelantó su guarnición algunas guerrillas.
Después del reconocimiento continuaron tranquilamente las tropas su marcha a Vibel (actualmente Viver).
Hechos los aprestos y tomadas las providencias a que dio lugar el minucioso reconocimiento practicado, se procedió a ir formalizando el sitio; se encargó el mando de toda la línea al brigadier Becar; ocupó el batallón de Almansa, en la noche del 17, el pueblo de Bejís, con poca pérdida y haciendo algunos prisioneros, y sin embargo del temporal de agua y nieve que reinaba y de los muchos trabajos que hubo que emprender, el 20 estaban ya concluidas cuatro baterías.
ATAQUE AL CASTILLO
El terreno que rodeaba a Bejís se oponía al ataque, y hubo que subordinar la colocación de las tropas a las condiciones de la localidad, harto variadas.
El Castillo era sólo accesible por un frente, asegurando a los demás un profundo barranco. Para abrir brecha en la cortina del frente que miraba al pueblo, su grande desnivel hacía que la artillería jugase por elevación.
Foto procedente del Archiu Mas - año 1919.
A las 5 de la tarde del mismo día 20 contestaron todas las piezas sitiadoras a los fuegos del Castillo. Bien dirigidos y activo en todo el día 21, hizo que al anochecer estuviese practicable la brecha y destruidas por los proyectiles huecos algunas obras interiores.
Dispuesto el asalto para el 22, supo Azpiroz a las 12 de la noche que los carlistas, aprovechando la oscuridad y estrepitoso ruido del huracán, intentaban hacer una salida, y aunque se trasladó instantáneamente al punto, las avanzadas habían ya muerto a siete y cogido catorce de los que habían salido del fuerte, salvándose cinco, incluso el Gobernador Vizcarro, que es fama jurara antes sepultarse en las ruinas del Castillo.
A las 2 de la madrugada se rindieron sin condición los 120 hombres que restaban, quedando en poder de los liberales sus fusiles, tres piezas y abundantes repuestos. Los prisioneros se enviaron a Murviedro (actualmente Sagunto).
En este mismo día 22 recibió orden Aspiroz del duque de la Victoria para cubrir la carretera desde Albacete, a fin de asegurar el viaje de Sus Majestades (la reina Isabel II) y Alteza a Valencia".
(Publicado en el Programa de Fiestas de Bejís, año 1990).
